domingo, 7 de marzo de 2010

Entrenando en Vucetich

Sábado a la mañana, no solemos despertarnos temprano los sábados pero este valía la pena. Ibamos a
correr un poco y a andar en bici a la Vucetich, escuela de policía que queda camino a la Plata
Como el plan pintaba bueno, a las 7 arriba y enfilamos con Susana, mi novia, para el lugar.
Llegamos al toque aunque pifiamos la salida de Hudson y tuvimos que retomar.
Día espectacular, sol con un par de nubes pero no calor. La verdad que estaban los planetas alineados
porque últimamente este verano los fines de semana estuvieron bastante feos.
Al desembarcar en la Vucetich, aplicamos OFF en abundancia porque los moquitos venían de a batallones,
escuadrones y companías, se vé que al estar en la escuela de la cana los tipos aprendieron y se organizaron
para atacarnos.

Después de embadurnarnos en OFF, el Colo nos pasó unos mapitas muy bonitos con los puntos del recorrido
que teníamos que tocar. La verdad que no entendí nada pero porque no presté nada de atención, quería
largarme a correr YA. Terminamos la charla técnica, fuimos al baño, entramos un poco en calor y
salimos a pata a darle la primer vuelta al recorrido (eran vueltas de 8 o 9k).
Arrancamos por un camino de asfalto para luego hacer campo traviesa por unos pastizales verdes que,
-oh si- estaban infestados de mosquitos. Un grupo largó antes que el mío y vendríamos 100 metros
detrás de ellos con lo cual, estos levantaban con su paso a los moscos locos y nos los
fumábamos nosotros. Eran nubes y nubes de mosquitos famélicos -en realidad mosquitas, porque la que pica es la hembra,
necesita el plasma nuestro para deshovar-. En un momento entramos a un bosque con un sendero por el que pasa
una bicicleta, el bosque era bastante cerrado por lo cual con mis lentes de sol oscuros veía bastante
poco. En realidad no veía una goma, la mitad de los palitos y piedras no los veía (nota mental,
comprar anteojos de plástico transparente MTI). El recorrido bordeaba un arroyo y tenía algunos puentes
medio venidos abajo que lo cruzaban en distintos puntos.

Después de darle la primera vuelta a pie teníamos que agarrar las bicis y salir pero hubo una parada
obligatoria porque nos olvidamos los cascos adentro de los autos y el grupo que venía detrás nuestro era
quien tenía la llaves encima -cuak-.
Una vez que tomamos control de los cascos y elementos de seguridad para el ciclista partimos a darle
otra vuelta al circuito, esta vez en bici.

Bueno, hacer este sendero por el bosque en bici fue la diversión en estado puro. Si la bicicleta no fuera
mía, le hubiese metido mas palo porque la verdad que el recorrido daba. Muy muy divertido.
Repetimos: muy muy divertido. Jejeje.

Cosas divertidas que tiene el recorrido: - Árboles, muchos, finitos, gruesos, etc, ojo no tropezar con
ninguno, hubo algunos valientes que eligieron convivir cuerpo a cuerpo con la naturaleza llevándose
árboles de regalo. Yo estuve a esto de pegarme un palo fiero contra uno pero pude evitarlo con un
volantazo desesperado.
-Charcos de agua. Parecían charquitos pero era cuestión de mandarse con la bici que algunos tenían
la profundidad suficiente como para morfarte la mitad de la rueda. Genial.
-Mosquitas. Tema ya tocado
-Recorrido histórico. Puentes viejos, construcciones venidas abajo y estatuas en el recorrido.
-Arroyos. Interesante para seguir viaje cuando venís embalado en una curva e ir a parar adentro
-Puentes de FFCC, había que cruzarlos obviamente cuando NO venía el tren.
-Palos sueltos. Mi coequiper Pablo levantó uno del sendero con la rueda trasera y reventó el fusible
de su bici (es el elemento que agarra los cambios al cuadro). Pase a taller. Seguimos a pata hasta la meta.

También Susana se copó y se pegó un lindo palo en bici. Había para todos.
En fin, muy lindo todo, muy recomendable, gracias Colo, cambio y fuera.